Digamos que usted se toma muy en serio su salud bucal. Nunca se salta los controles dentales semestrales, se cepilla los dientes dos veces al día y evita comer dulces y alimentos procesados. Aunque su rutina de cuidado bucal merece un 10 de calificación, eso no significa que nunca tendrá dolor dental. Las caries son la causa más probable del dolor, pero también hay otras posibles razones. Estas van desde rechinar los dientes hasta infecciones sinusales. Repasemos los diferentes tipos de dolor dental, sus causas más allá de las caries y la importancia de acudir al consultorio dental cuando el dolor dura más de uno o dos días.
Sensibilidad dental
Si siente dolores agudos al comer o beber alimentos y líquidos a temperaturas extremas, podría significar que tiene caries. Pero también puede ser una señal de sensibilidad dental, una causa común de dolor dental. Esto ocurre cuando la capa interna de los dientes, conocida como dentina, queda expuesta. En estos casos, la dentina suele quedar expuesta por el desgaste del esmalte o por la recesión de las encías, lo cual puede ocurrir debido al cepillado excesivo, traumatismos o golpes, entre otras razones.
Dolores más intensos
Algunos tipos de dolor dental pueden ser más severos. Si siente un dolor agudo al morder un alimento, la causa podría ser un diente fracturado. Por otro lado, si experimenta un dolor punzante y constante, es posible que tenga un absceso dental o una infección. Consulte a su dentista lo antes posible, ya que un absceso puede permitir que la infección se propague a la boca o el cuello, lo que podría derivar en complicaciones graves.
Causas menos comunes del dolor dental
En algunos casos, el dolor dental no está relacionado directamente con los dientes. Por ejemplo:
- Sinusitis: Las infecciones de los senos nasales pueden causar dolor en los dientes superiores de ambos lados de la cara. Este tipo de dolor suele estar acompañado de congestión nasal y sensibilidad alrededor de los senos nasales.
- Trastornos temporomandibulares (TTM): Si el dolor se concentra más en la mandíbula que en un diente específico, podría deberse a bruxismo, artritis, lesiones en la mandíbula o incluso molares impactados (como las muelas del juicio).
Evite problemas y consulte a su dentista
Incluso si su dolor dental es leve o intermitente, esto no significa que deba ignorarlo. Esperar a que el dolor empeore no suele ser la mejor opción. Sin importar la intensidad o el tipo de dolor, lo mejor es llamar al dentista y pedir una cita cuanto antes.
Según la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, algunos medicamentos de venta sin receta para aliviar el dolor dental pueden representar riesgos. Por ejemplo, la benzocaína, un ingrediente común en geles para el dolor de muelas, se ha relacionado con una enfermedad poco frecuente llamada metahemoglobinemia. Su dentista podrá determinar si este medicamento es adecuado para usted y cuál sería la cantidad segura.
Las causas del dolor dental no siempre son claras, pero un diagnóstico profesional puede ayudarle a tratarlo eficazmente. Mientras espera su consulta, revise algunos consejos para aliviar el dolor desde casa y continúe con su excelente rutina de cuidado bucal.